Hoy probaré a escribir una entrada personal, para experimentar un poco.
Estoy HARTO de los higos chumbos.
Todos los años por estas fechas me pasa lo mismo: entra en mi campo de visión un higo chumbo, y me lo tengo que comer.
La semana pasada ocurrió en el supermercado; me crucé con una bandeja de higos chumbos, bien presentados y limpitos, y todavía me estoy sacando las espinas de las manos.
Peor aún ha sido cuando, alguna vez, me los he encontrado en la propia chumbera, al borde de una carretera comarcal cualquiera… mi capricho, en esos casos, ha terminado siempre en una masacre.
Y todo para nada. Porque cuando por fin llega el momento de hincarles el diente y rentabilizar tanto sufrimiento, sólo puedes ofrecer al paladar una pulpa insípida y plagada de pepitas.
Todavía no he llegado a lo peor. Lo peor es que el año que viene volveré a comprar higos chumbos en el supermercado, si tengo la fortuna de no cruzármelos antes por la carretera.
Y es que soy el único hombre del mundo que verá un día hablar a una piedra… una piedra que me dirá: “cobro vida momentánea, humano extraño, para suplicarte por lo que más quieras que no vuelvas a tropezarte conmigo… ¡que me tienes frita!”
24 comentarios:
Supongo Víctor que a todos nos pasa, en algún momento, elegir alguna actividad que no nos es favorable en algún sentido pero que, igualmente, hacemos.
Pensemos que hay seguramente alguna escala en la cual medir ese carácter de desfavorable. ¿Cómo caracterizarías de 0 a 10 cuán desfavorable es la actividad de comer o intentar comer higos chumbos?
Por otra parte: ¿serán los higos chumbos lo que aquí llamamos "higos de tuna"?
Mi abuelo materno comía higos de tuna que encontraba por ahí, en cualquier parte. No recuerdo si se pinchaba con las espinas porque no le prestaba mucha atención: yo tenía cuatro o cinco años.
Saludos desde Buenos Aires.
¡Jajajaja! esta estrada "personal" esta buenísima, ya veo que eso de maldecir es contagioso, no necesariamente bueno, pero por lo menos sirve para desahogar las emociones :)
Pues ya en este contexto, cuando leí lo que escribiste, mi primera reacción fue pensar a la vez que me reía: "¿Qué &#@%* son los higos chumbos?" (perdonen ustedes pero así sucedió) así que revisé rápidamente en Internet y ahí me enteré que es lo que aquí llamos "Tunas" y ¡cómo no conocerlas! si están en el mismísimo emblema nacional (si no vean donde está parada la aguilita en el escudo de mi bandera), bueno, donde está parada se le llama "nopal" y los frutos son las "tunas=higos chumbos"
Pues mi experiencia con estas frutas siempre ha sido de 0-1 en la escala de desfavorabilidad propuesta por Roberto y muy próximamente aceptada para el Sistema Internacional de Medidas. Si me he llegado a espinar pero son espinitas muy chiquitas y yo me aguanto aunque me duelan, ya bien lo dijo Jorge Negrete: "Me he de comer esa tuna aunque me espine la mano".
A mi me gustan mucho porque son muy dulces, a veces sale alguna amarguita pero generalmente me gustan mucho, así que, no desistas en tu relación con los higos chumbos pues en algo nos parecemos: a mi nunca me han gustado las aceitunas pero cuando tengo alguna enfrente de mi me digo "vamos a intentarlo, quizá ahora si me gusten" y siempre termino haciendo gestos de desagrado, sin embargo lo seguiré intentando hasta el final, quizá en una de esas me diga "ya me gustó".
Saludos!
¿Cómo pueden no gustarte las aceitunas, Myriam? Yo diría que como pizza más que nada por las aceitunas (negras, claro!).
Víctor, el primer paso es asumir que repites y repites con la misma piedra.
A ver si el año que viene lo recuerdas y no caes en la tentación.
Me ha gustado mucho la entrada en plan confesión de terapia de grupo, a lo que deberíamos contestar todos a coro: "te quereeeeeeeeeeeemos Víctor, tus probleeeeeemas son nuestros problemas".
Saludos.
Buenísima idea:
"¡¡¡Te quereeeeeeeeeeeemos Víctor, tus probleeeeeemas son nuestros problemas!!!".
:) jejeje
No me gustan Roberto, se me hacen lo más amargo y más intenso que hay en cuanto a alimentos, pero lo seguiré intentando :)
Sí Roberto, "el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra", jeje..
Efectivamente, lo que aquí llamamos "higo chumbos" son las tunas y proceden originariamente de México. Lo he averiguado en internet.
Pues mira, creo que lo que me atrae de los higos chumbos es su naturaleza salvaje, no cultivada. Como las moras, las frambuesas, o las fresas silvestres. En ese aspecto, me resulta satisfactorio obtenerlos. Pongamos un 6.
Pero la calidad del fruto, al menos en España, es escasa, por lo que a la experiencia de comerlos le doy un 1.
La calificación media sería, por tanto, un 3,5.
Saludos
Myriam, ya he visto que los higos chumbos son una "maldición" que viene de México. Debe ser algo así como la "venganza de Moctezuma", jeje... (¿sabes en qué consiste esa "venganza"?).
Aquí no son muy dulces. La planta crece en el sur, en Andalucía, donde hace más calor, pero aún así no debe hacer calor suficiente para que como salgan verdaderamente buenos.
Las aceitunas me encantan, y España es el paraíso de ellas. Las hay de todos los tipos y preparaciones imaginables. Pero si lo que gustan son los sabores dulces... con las aceitunas llevas mal camino.
Clara, muy hábil de tu parte ese intento de distribuir las cargas entre el público cibernético, pero me temo que no cuela... mis probleeeeeeeemas son TUUUUUUUSSS probleeeeeemas, jeje
Me temo que sí, que el año que viene me oirás renegar otra vez de los higos chumbos... es como la llamada de la selva, jajaja
Veamos veamos ...
realmente comer higos, quedándonos con los dedos llenos de espinas ... no me parece lo adecuado, pero por otro lado los gustos hay que dárselos.
Te propongo que cambies el termino chumbo por blanco turco, y que pruebes unos higos blancos turcos rellenos con nuez y bañados de chocolate negro; en casa los solemos comer en navidad, pero realmente creo que con sus temperaturas para diciembre les serán de mejor provecho.
En cuanto a la maldición de Moctezuma, según dice tío Google, se trataría de una diarrea que tendrían los visitantes de México, pero creo que los higos chumbos no generan ese problema. ¿Tal vez vez se trate de la maldición de Malinche? pero no, no se ajusta mucho. Tal vez Myrian podría explicarnos algo.
Saludos
No te sientas solo Víctor. A mí también me hablan las piedras. Y lo que es peor: ¡yo le hablo a ellas! Eso sí... cuando me voy a topar con una con la que tropecé antaño... le doy un rodeo. O lo intento. A veces me asalta y cuando me quiero dar cuenta la tengo encima con su cantinela: -si ya te lo dijeeeeee... pa' qué insisteesssss...
Aquí en mi tierra hay muuuuuuuuchas chumberas. Hoy, sin ir más lejos, vi varios llanos repletos de ellas. Y, claro, se fabrica un licor de chumbo que igual te sirve pa’ sustituir. Aunque tendrá tropecientos grados de alcohol, imagino.
Y ¡cómo eresssssssss!... al decirle a Clara que TUUUUSSSS problemas son SUUUUUSSSS problemas. Aunque me has arrancado una carcajada, la verdad. Ha estado agudo Clara, las cosas como son.
Y a todo esto... ¿qué valoración haces de tu “experimento”? O es... “personal” e intransferible.
Eso de hablarle a las piedras Leve es casi tan grave -o más- que lo mío, jeje..
¿un llano repleto de chumberas, dices? ¡¡qué visión más pavorosa!!.. si llego a pasar por allí, el martirio de San Sebastián iba a ser un juego de niños comparado con lo que me iba a ocurrir a mí.
Clara no dice nada... creo que eso significa que me da la razón, jeje..
Mi valoración la tienes más arriba, en el 7º comentario, Rompetechos. ;)
Qué va, qué va... son incluso muy bonitos los llanos repletos de esa planta cuasi innombrable. Igual si te enseño una foto te sirve como chumboterapia. Nunca se sabe.
Sr. abuelo cebolleta... la valoración por la que le preguntaba era relativa a lo de escribir “entradas personales”, je-je.
Y no creas, conversar con las piedras tiene su punto. ¡Ni rechistan!
Fdo: Ex–rompetechos.
jeje, abuelo cebolleta dice.. me has calado rápido la vena faltona; mira que Rompetechos era mi personaje favorito de la saga Ibáñez.
Mi valoración del aspecto mencionado es cautelosamente positiva, seguramente porque me he quedado en la epidermis.
Son las "figas de moro" en catalán, los higos chumbos?
Hola Mati, me alegra verte por aquí de nuevo, hacía tiempo que no comentabas ¿será porque nos hemos visto más? jeje
No conocía el nombre en catalán, no recuerdo haber visto siquiera higos chumbos en la época de Barcelona.. pero en internet he averiguado que sí que son, sólo que se escribe "figues de moro" (has debido lusitanizar el nombre catalán)
Otra cosa Mati. Mira a la derecha, donde pone "lista de blogs", y vete a uno que se llama "Ressest"... que te vas a llevar una sorpresa.
ya he tenido la sorpresa... y las figues catalanas son figos por tugueses... pero las de moro no sé como se dicen en portugués. Tambien las hay aqui en el Alentejo y Algarve. En Lanzarote hacen una mermelada buenisima (.... bueno.... sabe a muy poco pero es muy clarita, suave y cristalina)de estos frutos. Ya has estado en Lanzarote?
No comento más, Victor, porque me dá mucha pereza!
Pero sigo tus "webabouts" siempre con mucho interés.
Ya he leído el libro que me enviasteis. Dile a Clara que me gustó mucho. Casi a propósito me viene a la mente los que acaban de condenar en Francia por tráfico de armas en Angola.
Ahora estoy leyendo el último de Saramago, "Cain", que ha provocado aqui un terremoto en algunos medios católicos.
Besos
Mati, no hemos ido todavía a Lanzarote, pero no tardaremos mucho, dadas las buenas referencias que tenemos.
Entonces la próxima vez que me pase por tu casa te llevaré 4 o 5 kilos de higos chumbos para que me hagas mermelada, jeje..
Yo me acabo de leer el Ensayo sobre la ceguera, ya ves que voy con un poco de retraso con Saramago. El libro de Caín creo que me va a dar más pereza, por el tema, ya me dirás qué te parece.
Besos
Donde se pongan Mortadelo, Filemón y el profesor Bacterio...con historieta megalarga claro... son los monarcas del reino de Ibáñez. Aunque no le hago ascos a ninguna de sus criaturillas.
Sí, Victor, haré la mermelada pero tu me los pelas!!!!
Estoy acabando el libro de Caín, y seguro que te gustará.
Hoy, una periodista, relatando el último atentado en Peshawar, lo describia como una carnificina bíblica. Para mí que ya estaba influenciada por el libro de Saramago.
El pajarito que más me ha gustado es el petirrojo, sobretodo por lo bien que lo has encuadrado.Una obra de arte. Voy a ver si lo pinto.
mmmmmm.. si tengo que pelarlos me lo tendré que pensar, jeje..
"carnificina" no es español, supongo que debes querer decir "carnicería". Pues sí, esa gente ha enloquecido completamente, ya veremos en qué acaba todo esto..
Está bien encuadrado porque he recortado y ampliado la foto... pero photoshop no he utilizado, que conste. Pues el pajarito tiene una posición complicada para pintarle ¡a ver qué tal te sale!
Sí Leve, recuerdo muy bien esas historietas largas, jeje.. también eran mis favoritas. Tengo que recuperar todos esos Superhumor, y los especiales, no sé dónde los he metido.
¿Sabes que siguen publicando historietas de Mortadelo y Filemón? Y ahora con temas de actualidad.
No lo sabía pero me late que ya no será igual. De hecho el otro día estuve en un super en el que había toda una estantería con números que supuse recientes, o relativamente recientes. Eché un vistazo a alguno pero ninguno me atrapó. Los dibujos no son iguales... han perdido algo. Quizás la mano de Ibáñez en sí.
Bien podría ser la mano, porque lleva dibujando 40 o 50 años. Hace tiempo que no veo uno de los tebeos modernos, les volveré a echar un vistazo y te doy mi impresión.
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