miércoles, 30 de mayo de 2012

París (II)

Otra entrada de París. Esta primera foto es del hotel donde nos hospedamos. Estaba muy bien situado, y por ese motivo lo recomiendo para quien desee visitar la ciudad. Es un modesto hotel de dos estrellas (deux étoiles), y no “de cinco o siete” (según se ha rumoreado por aquí…). Es un pelín caro para lo que ofrece, pero es que en París no hay nada barato.


A quien tenga intención de viajar a París, le aconsejo que se informe previamente sobre la tarjeta Paris-Pass. Te permite acceder gratuitamente a numerosos monumentos durante un determinado número de días, e incluye un abono para usar libremente el transporte público en esos mismos días. Con esta tarjeta no ahorras realmente mucho dinero (si sigues un ritmo de visitas “normal”), pero tiene una gran virtud que descubres en ciertos momentos clave: con ella puedes saltarte algunas colas enormes. De hecho, si entramos en algunos lugares (Museo del Louvre, Museo de Orsay, o la Sainte Chapelle), fue porque no tuvimos que chuparnos las colas kilométricas que te encontrabas en la puerta. 

Recomiendo especialmente visitar la Sainte Chapelle. Había estado otras veces en París y nunca me había parado a ver este lugar. Con tanta cosa que tiene que ver esa ciudad, esta Sainte Chapelle pasa un poco desapercibida; pero su visita me parece obligada para quien disfrute con el estilo gótico. 

Se trata de una capilla construida entre los años 1242 y 1248, que destaca por sus espectaculares vidrieras. Las vidrieras no vienen a ocupar el espacio de las ventanas, como es lo habitual, sino el espacio ¡de las paredes! Apenas hay paredes con muros de fábrica, sólo una borrachera de vidrieras sostenidas por esbeltas columnas. Por la tarde, que es cuando fuimos nosotros, la visión era espectacular. Esta capilla se encuentra en el interior de un complejo de edificios administrativos actualmente en uso (el Tribunal Correccional de París, me parece recordar), por lo que hay que pasar un control policial para entrar.







Y, tras encomendarnos al Altísimo, vamos a encomendarnos también al Bajísimo (cualquier ayuda es poca para los tiempos que corren por estos lares). A continuación voy a subir unas cuantas fotos de otro lugar, y planteo un concurso: ¿alguien me puede decir a qué edificio pertenecen estas tenebrosas y demoníacas imágenes que siguen?

















domingo, 20 de mayo de 2012

La amistad


Atención a la interesante definición que he encontrado de la amistad.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Llegó el día

Vaya, parece que hoy, día 9 de mayo de 2012, ha llegado el verano a Madrid... Hoy ha sido el día del click, el día del cambio repentino, el primer día caluroso del año. Por la calle, iba la mitad de la gente excesivamente abrigada -los que salieron despistados de su casa temprano por la mañana-, y la otra mitad en camiseta de manga corta. Hoy he formado parte del primer grupo, sudando la gota gorda con un traje de invierno bien grueso y bien negro; mañana, será otra cosa. Como dato anecdótico podemos añadir que hoy han nacionalizado Bankia. Pero esto último carece de trascendencia climática, por lo que tampoco debe ser tan tan tan importante.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Jorge Ben: "Fio Maravilha"


La felicidad o la infelicidad no son sentimientos que constituyan el efecto de los acontecimientos externos en el ánimo de uno, sino el resultado de la actitud que uno tiene ante la vida. Sólo así se puede explicar que unas personas, en situaciones muy complicadas, se mantengan pese a todo alegres, y que otras personas, en situaciones mucho menos complicadas, estén tristes.

En el año 1972, Jorge Ben Jor compuso la canción “Fio Maravilha”. Esta canción trata sobre un jugador de fútbol de la época, llamado João Batista de Sales y apodado “Fio Maravilha” -que sería entonces muy conocido, pero que hoy en día se encuentra completamente olvidado-, y nos relata un gol que este hombre marcó una vez.

La letra dice así:

Y nuevamente llegó con inspiración,
Con mucho amor, con emoción, con explosión y gol
Sacudiendo a la afición
A los treinta y tres minutos del segundo tiempo
Después de hacer una jugada celestial
Hizo una pared, dribló a dos defensas
De un toque dribló al portero
Sólo no entro con la pelota y todo
Porque tuvo humildad
Fue un gol de clase
Donde mostró su malicia y su raza
Fue un gol de ángel
Un verdadero gol de placa
Que la grada agradecida así cantaba
Fio Maravilha, nos gustas
Fio Maravilha, haz otro más para que la gente lo vea

Y aquí viene un vídeo con la música:



La canción tuvo un gran éxito nada más salir. Ganó uno de los festivales de música de entonces, que ahora se ven tan casposos –el Festival Internacional de la Canción de 1972-, y era cantada por la hinchada del Flamengo en el Estadio de Maracaná. Para Fio Maravilha tuvo que haber sido un motivo de orgullo y alegría que su nombre se popularizara de tal forma con la canción.

Sin embargo, el tal Fio Maravilha cometió un error. Se le ocurrió reclamar a Jorge Ben una compensación económica por el uso de su nombre. Jorge Ben se enfadó y cambió el título de la canción por el de Filho (hijo) Maravilha. Con este nuevo nombre aparece el tema en los recopilatarios posteriores (y se canta en el vídeo anterior).

Hace un tiempo me pregunté qué habría sido de este hombre, y rápidamente lo averigüé. En youtube existe un vídeo reciente, del 2007, en el que le entrevistan. Resulta que Fio Maravilha vive ahora en San Francisco, y trabaja como repartidor de pizzas a domicilio.

Uno podría pensar que una persona que lo ha tenido todo, que ha sido aclamada por las masas, debe sentirse bastante frustrado repartiendo pizzas en el más estricto anonimato. O que debería estar amargado por haber desaprovechado la gran oportunidad que tuvo de ser recordado para siempre a través de la música, una vez olvidadas sus glorias deportivas.

Pues nada de eso. Al tipo se le ve bastante feliz y satisfecho con su vida, como se puede apreciar en el video que viene a continuación. El video está en portugués, pero creo que se entiende lo suficientemente bien. Entre 3:47 y 5:40, él mismo explica cómo fue el gol al que hace referencia la canción (del cual no hay imágenes, pues se han perdido).


En fin, que más vale intentar ser feliz, porque los acontecimientos externos van a seguir su curso con independencia de que seamos felices o infelices.

Y, algo relacionado con esto, reproduzco una buena noticia referida a España que he leído hace poco en el periódico: por lo visto, con esto de la crisis, han aumentado mucho los suicidios en Grecia, en Italia, y el algún otro país que no recuerdo; en cambio, parece ser que en España han descendido significativamente. ¿Será una mera casualidad estadística, o el síntoma de una saludable actitud ante la vida?