El sábado de la semana pasada se celebró en Madrid la “Noche en Blanco 2010”, y salimos a curiosear un poco… a ver qué era eso exactamente.
Os cuento algunos antecedentes, para los lectores de fuera. La “Noche en Blanco” es un movimiento que se inició en París en el año 2002. En esencia, pretende dejar abierta la ciudad durante toda una noche y que los ciudadanos se la pasen sin dormir, en blanco. Se cortan al tráfico las avenidas principales a fin de ganar la calzada para los peatones, se organizan actividades lúdicas por todas partes, y se dejan abiertos los museos. En Madrid se empezó a celebrar en el año 2006. Se calcula que este año han salido a la calle 700.000 personas (no está mal, para una ciudad de 3 millones de habitantes).
No nos habíamos animado a ir hasta ahora, pero este año hemos vencido la pereza y nos hemos acercado. El ambiente nos ha sorprendido muy gratamente. Hay tanta gente como en cualquiera de esas manifestaciones gigantescas, pero sin que exista unidad de propósito en la muchedumbre… esto es, cada persona hace el recorrido que le da la gana y se detiene ante las actividades o en los museos que mejor le parece.
Nos dimos una vuelta considerable (Gran Vía, Callao, Sol, zona de Huertas, y la Castellana desde Neptuno hasta Colón). Todas esas calles habían sido peatonalizadas y se encontraban repletas de gente, pero sin llegar a resultar agobiante. En Cibeles se habían instalado unos grandes altavoces, y allí estaba la gente bailando al son de la música en plena plaza.
Pasando junto al edificio del Congreso escuchamos una grabación en la que sonaba una voz hablando con acento mexicano. Inmediatamente me vino a la cabeza nuestra amiga Myriam y se me despertó el conocido instinto del bloguero… nos acercamos a mirar, y vinos que sobre la pared de un edificio (que resultó ser la embajada de México, cuyo emplazamiento ignoraba hasta ese momento) lucían tres colores (rojo, blanco y verde) al tiempo que se proyectaba un audiovisual relativo al bicentenario de la independencia de México.
Le pedí a Clara (responsable oficial de grabación y montaje de videos para este blog, como sabéis) que grabase un poco la escena y el propio ambiente de las calles. Lo que sale en el video es una buena muestra de la noche en blanco: un grupo de personas prestando atención a la concreta actividad que se desarrolla en ese lugar, y el resto paseando simplemente por la calle.
Eso sí, o se sale cenado de casa, o se tiene paciencia para cenar fuera, porque tooooodos los restaurantes y terrazas de estaban a reventar. Crisis, ¿what crisis?
Os cuento algunos antecedentes, para los lectores de fuera. La “Noche en Blanco” es un movimiento que se inició en París en el año 2002. En esencia, pretende dejar abierta la ciudad durante toda una noche y que los ciudadanos se la pasen sin dormir, en blanco. Se cortan al tráfico las avenidas principales a fin de ganar la calzada para los peatones, se organizan actividades lúdicas por todas partes, y se dejan abiertos los museos. En Madrid se empezó a celebrar en el año 2006. Se calcula que este año han salido a la calle 700.000 personas (no está mal, para una ciudad de 3 millones de habitantes).
No nos habíamos animado a ir hasta ahora, pero este año hemos vencido la pereza y nos hemos acercado. El ambiente nos ha sorprendido muy gratamente. Hay tanta gente como en cualquiera de esas manifestaciones gigantescas, pero sin que exista unidad de propósito en la muchedumbre… esto es, cada persona hace el recorrido que le da la gana y se detiene ante las actividades o en los museos que mejor le parece.
Nos dimos una vuelta considerable (Gran Vía, Callao, Sol, zona de Huertas, y la Castellana desde Neptuno hasta Colón). Todas esas calles habían sido peatonalizadas y se encontraban repletas de gente, pero sin llegar a resultar agobiante. En Cibeles se habían instalado unos grandes altavoces, y allí estaba la gente bailando al son de la música en plena plaza.
Pasando junto al edificio del Congreso escuchamos una grabación en la que sonaba una voz hablando con acento mexicano. Inmediatamente me vino a la cabeza nuestra amiga Myriam y se me despertó el conocido instinto del bloguero… nos acercamos a mirar, y vinos que sobre la pared de un edificio (que resultó ser la embajada de México, cuyo emplazamiento ignoraba hasta ese momento) lucían tres colores (rojo, blanco y verde) al tiempo que se proyectaba un audiovisual relativo al bicentenario de la independencia de México.
Le pedí a Clara (responsable oficial de grabación y montaje de videos para este blog, como sabéis) que grabase un poco la escena y el propio ambiente de las calles. Lo que sale en el video es una buena muestra de la noche en blanco: un grupo de personas prestando atención a la concreta actividad que se desarrolla en ese lugar, y el resto paseando simplemente por la calle.
Eso sí, o se sale cenado de casa, o se tiene paciencia para cenar fuera, porque tooooodos los restaurantes y terrazas de estaban a reventar. Crisis, ¿what crisis?
8 comentarios:
Es muy recomendable. Hay una serie de actividades oficiales, como unos enormes columpios en medio de la Gran Vía hechos con materiales reciclados o una plaza convertida en una macropiscina de bolas. Pero también hay otras no oficiales, artistas callejeros que aprovechan la oportunidad. De hecho, vimos alguna que no estaba nada mal. Pero lo mejor era el ambiente. Todo el centro cerrado y la gente paseando por el medio de las grandes calles y avenidas que normalmente están atestadas de tráfico. Y el buen rollo que se respiraba. Otro año repetiremos, seguro.
Saludos
¡¡Ay que súper bueno está el video!! me encantó :D
Gracias por tenerme presente por aquellos lugares ¡snif! :D me conmuevo mucho.
Pues si, son vocecillas mexicanas las del video y veo que mencionan a Francisco I. Madero jeje, acá como saben, recién el miércoles festejamos el Bicentenario y el nombre de ese personaje y muchos otros han resonado varias veces por día durante toda esta temporada.
Víctor y Clara, gracias por compartir conmigo y todos los lectores un pedacito del Madrid mexicano, que emoción, yo que nunca he estado allá ya siento un lazo afectivo con su país.
Les mando a los dos un abrazote :) :) me hicieron pasar un momento muy agradable. Beso!
¡Ayyy estos capitalinos qué suertudos sois!... ¡Y qué envidiosas algunas provincianas, je!
Eso digo yo, Víctor, what crisis?
Bien es verdad que habían puesto sólo cuatro columpios para tropecientas mil personas, con lo que resultaban más decorativos que otra cosa. Lo que sí tenemos que hacer el año que viene es ir a la macropiscina de bolas, ¿vale? Prometo comportarme :-P
Pues yo me alegro de que te alegres Myriam :-)
Lamentablemente, eso que sale en el video es la única celebración que he visto, en España, del Bicentenario de México. Tampoco recuerdo haber visto nada sobre el Bicentenario de Argentina. Creo que se podría haber aprovechado para hacer algún tipo de celebración conjunta (sin perjuicio de la celebración propia de cada país) para resaltar lo mucho que nos une, pero bueno, tenemos los gobiernos que tenemos..
Un abrazo para ti
Leve, ¿hace falta que te recuerde que estamos a 400 km del mar? Vaya lo uno por lo otro.. ;-)
Que aquí la gente se compra segundas residencias en Almería pensando que se las compra en el paraísooooooo..
Ésa es una de las muchas ventajas de vivir en una gran ciudad como Madrid... Que hay ofertas lúdicas de todo tipo.
Saludos.
Así es Civilis. A cambio, no tenemos mucho tiempo para disfrutarlas. Un saludo
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